Ayer me hice con un buen arsenal de 'cachivaches' decorativos para traer ya la Navidad en casa. Ya hemos convertido en tradición el paseíto por la Fira de Santa Llúcia para añadir alguna figurita al Pesebre e ir incrementando la colección de 'caganers' del peque. Reconozco que ésta de colocar un 'caganer' en el Pesebre es una de aquellas tradiciones como poco curiosas para aquéllos que no la han vivido desde siempre, pero para nosotros un Pesebre no está completo si no tiene su 'caganer'. Para acabarlo de redondear, además del 'caganer' tradicional, desde hace unos años se hacen versiones de la figurita en cuestión de diferentes personajes de ficción y reales. Y no se hace en absoluto con una intención de ridiculizar ni ofender. Más bien al contrario, si eres famoso y no tienes tu figurita de 'caganer' es que no has logrado suficiente notoriedad ni transcendencia pública...Qué cosas, verdad?
Toda la deco de Navidad que tenemos de años anteriores es muy kitsch y este año me estaba apeteciendo algo más 'mono-cromático' y qué mejor lugar que la Fira de Santa Llúcia de Barcelona para conseguirlo todo.
No he podido dejar de lado el 'momento pesebre', en versión adulta y versión infantil de Playmobil. Y he aprovechado la habitación del peque para poner un poco de color a la Navidad.
Pero el resto, como os decía, más 'mono-cromático': Árbol blanco, y velas, bolas, guirnaldas,...en dorado y camel. Acostumbrada como estaba al 'estallido de color' anual, la decoración de este año me resulta la mar de chic y estilosa.
Realmente, no me puede gustar más como ha quedado mi salón.
Y vosotras, sois más de colorines o preferís desarrollar toda la decoración a partir de dos o tres colores?
Love,
Eva.
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